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Ten en cuenta que el mantenimiento que le das a tu calzado determina su tiempo de vida útil. Mientras más esmero pongas al cuidado, más duraderos serán.

CALZADO DE CUERO: Existen cuidados habituales que te ayudarán a prolongar la vida útil de tu calzado de cuero. Técnicas de guardado, la selección de los productos de aseo y los lugares donde utilices este tipo de prendas son importantes para su conservación.

Sigue las siguientes recomendaciones para el cuidado general de tus zapatos.

• Limpia antes de guardar. Es indispensable que guardes tu calzado de cuero sin restos de polvo, lodo, manchas de agua u otro agente que pueda dañarlos.
• Limpiar los restos de suciedad ya sea con un trapo humedecido o con el cepillo de cerdas suaves.
• Aplica el betún del color correspondiente o incoloro, como tú prefieras.
• Una vez se halla secado el betún retirarlo con un cepillo para darle brillo, utiliza siempre uno adecuado para zapatos.
• Y para un acabado espectacular y brillante, límpialos con un trapo seco suave, y ya verás los resultados.
• Almacena adecuadamente. Te sugerimos guardar sus zapatos en un lugar donde no queden expuestos a luz solar. Además, la zona debe estar climatizada, no debe haber excesos en las temperaturas. El armario, el zapatero o debajo de la cama, son sitios idóneos. Si pasarás más de un mes sin usar tu calzado, rellénalos con papel sin ácido. Esto te ayudará a mantener su forma.

Además debes nutrirlos para hidratar el cuero cada cierto tiempo para que no se agrieten y abran. Existen tipos de crema hidratantes especiales para zapato que te ayudarán a hidratarlos bien y parezcan nuevos. Sería bueno que realices este “mantenimiento” dos o tres veces al año.

CALZADO SINTÉTICO: 

El cuero de imitación no solo es un material económico, sino también respetuoso con los animales. Limpiar este material es fácil y te ocupará menos tiempo que los zapatos de piel real. También puedes optar por comprar productos especiales o hacerlo con lo que tienes en casa, esta opción te será mucho más económica.

Usar un poco de agua con jabón será suficiente para limpiar y eliminar manchas. Pero antes hay que eliminar los restos de polvo que tengan los zapatos.

• Con un cepillo o un trapo seco retira el polvo que se haya acumulado en los zapatos.
• A continuación, en una esponja húmeda aplica un poco de jabón de manos suave. Frótala sobre los zapatos para eliminar el resto de la suciedad que haya quedado adherida.
• Asegúrate de retirar todo el jabón un paño blanco seco.
• Si después de hacer esto persiste alguna mancha, toma un poco de detergente para lavar platos y aplícalo sobre una esponja un paño húmedo. Frótalo en el lugar donde está la mancha y luego limpia el detergente igual que antes.
• Por último, repasa toda la superficie con un trapo para asegurarte que no queden restos de jabón y pon los zapatos a secar.

Si después de hacer esto todavía queda alguna mancha de grasa, intenta limpiar los zapatos sintéticos con alcohol.

Para ello, solo mezcla una parte de alcohol con tres de agua. Humedece un paño y frótalo sobre la mancha. Retira el exceso de alcohol con un paño húmedo para evitar decoloración y luego pon a secar los zapatos.

CALZADO DE GAMUZA:  La Gamuza es uno de los materiales estrellas en el calzado. Aunque claramente muy delicados y si no hacemos un adecuado mantenimiento, pueden estropearse en poco tiempo.

Al comprar los zapatos, se aconseja utilizar un protector especial para gamuzas que ayudará a que la piel de nuestros zapatos no sea tan sensible a las condiciones del clima. Pero conviene decir que este método no es infalible así que también aconsejamos que evites usar tu calzado de gamuza en los días de lluvia, ya que el agua es el principal enemigo de este material. 

La Gamuza está formada por pelitos así que para retirar la suciedad de tus zapatos, lo mejor es usar un cepillo suave o un trapo seco.  Si se te han manchado tus zapatos o botas, se pueden limpiar suavemente con una esponja y un poco de detergente lavavajillas. Es recomendable que limpies todo el zapato, ya que si se altera un poco el tono del calzado por la limpieza que no te queden manchas.

Además, si haces esto, recuerda retirar con la esponja todos los restos de jabón y luego retirar el exceso de agua del calzado con un trapo limpio. Por último, simplemente déjalos secar en un lugar ventilado, pero sin exposición directa al sol o a fuentes de aire caliente, para no dañar los colores y arruinar el material.

CALZADO DE CHAROL: El charol es un material en el que tenemos que tener cuidado con los rayones, y además la suciedad se nota al instante. Así que para que un zapato de charol se vea brillante y en su mayor esplendor, tenemos que tener a mano un trapo suave, crema para hidratar o ceras especiales, y ya podemos comenzar.

• Elimina el polvo acumulado con un trapo humedecido en agua, y dejarlo secar.
• Aplica con un trapo seco una crema, ya sea vaselina o ceras especiales para calzado.
• Si no tienes en casa puedes utilizar un poco de aceite de oliva, o cualquier crema  hidratante grasa que tengas.
• Una vez lo hallas hecho ya puedes sacarle brillo, utiliza un trapo de algodón para frotar. Y listo, no volverás a utilizar un espejo, tus zapatos estarán relucientes como recién comprados.

CALZADO DE TELA: Limpiar este tipo de calzado es mucho más fácil que los anteriores. Ya que las puedes meter a la lavadora o lavarlas a mano, preferiblemente usar el  segundo método, ya que un uso prolongado de las lavadoras pueden dañar el calzado, ya que la mayoría utilizan pegamentos, que con los lavados podrían despegarse. Utilizaremos agua, jabón neutro y un cepillo.

• En un vaso con agua fría ponemos un poco de jabón neutro o el que utilizamos habitualmente para nuestra ropa, si la zapatilla lleva cordones, quitarlos antes, para que podamos limpiarla con más facilidad. Frotar con el cepillo haciendo más hincapié en las zonas más sucias.
• Puedes ponerlas debajo del grifo para retirar el jabón, dejarlas secar al aire, nunca ponerlas al sol, ya que sé cómo el color, o encima de radiadores.
• Podemos utilizar la pasta de dientes como el anterior caso para las suelas y punteras.
• En caso de usar la lavadora, usar agua fría, y no los pongas en  la secadora, ya que se pueden encoger.

CALZADO BLANCO: Los tenis blancos son una pieza elemental en nuestro armario, ya que podemos combinarlos con leggins, faldas, jeans y hasta pants. Pero el uso constante puede generar manchas amarillas que les quita la blancura y el brillo a nuestro calzado.

Y si te preguntas la manera de hacer que tus zapatos queden como nuevos, te presentamos algunos tips caseros para dejarlos blancos y limpios.

• Bicarbonato:Prepara una mezcla con bicarbonato de sodio y vinagre blanco, posteriormente frota con un cepillo tus tenis hasta eliminar las manchas ¡verás que tu calzado lucirá como nuevos!
• Harina o maicena: Lava tus sneakers como lo haces habitualmente, una vez que estén húmedos espolvorea la harina o la maicena sobre las manchas negras que observes y déjalos secar en el sol. Te darás cuenta como la fécula de maíz acabará con la suciedad de una vez por todas.
• Agua oxigenada: Si notas que tu calzado está percudido, deberás llenar una cubeta con agua y agregar un poco de agua oxigenada, posteriormente debes sumergir tus tenis durante 30 minutos y dejar que la mezcla actúe, ¡Déjalos secar al sol y estarán en perfecto estado!
• Limón: Ya sabemos que el limón es el mejor aclarante natural, por ello cuando veas manchas oscuras en tus tenis no olvides frotarlos con esta fruta partida a la mitad. Deja actuar al líquido por algunos minutos, enjuaga y el resultado te sorprenderá.
• Pasta de dientes: Uno de los métodos más fáciles para dejar tus tenis como nuevos, es utilizar pasta de dientes. Lo único que debes de hacer es frotar un poco de pasta dental con un cepillo en las manchas de tu calzado. Ocupa aquellas que contengan elementos blanqueadores para mejores resultados.

COMO MANTENER LA SUELA DE TU CALZADO: Al igual que la parte vistosa del calzado, las suelas también necesitan cuidados. Cabe recordar que esté el punto más expuesto al desgaste, en especial si es de piel. Darle a esta zona el mantenimiento adecuado evitará que se deteriore con facilidad. Para ello es importante que sigas el siguiente procedimiento.

• Límpialas con agua tibia y jabón. Realiza esto con ayuda de un paño de microfibra. Una vez limpias, utiliza un paño seco de microfibra para retirar el exceso de humedad.
• Encera uniformemente. Cuando las suelas estén secas en su totalidad, aplica una fina capa de cera hasta que quede bien cubierto el cuero.
• Cepilla con cuidado. Para pulir tus suelas, cepíllalas luego de encerarlas. Debes hacerlo como en la parte superior del zapato: con movimientos circulares.